Las escalas del universo son tan inmensas que es complicado para nuestro cerebro humano asumirlas. A lo largo de la evolución nuestro cerebro se ha adaptado a las escalas propias de su entorno, las que han sido necesarias para su supervivencia. Hasta hace varios cientos de años, hasta las escalas planetarias se nos hacían inconmensurables, aunque con la globalización hemos conseguido asumirlas en cierto modo. Pero los tamaños y las distancias que se producen en el univeso todavía nos producen confusión y dificultad de comprensión.
Vamos a hacer un ejercicio de comprensión de éstas escalas, iniciando por lo más cercano, nuestro sistema solar. Vamos a adaptar los tamaños de los astros y sus distancias a medidas que tenemos más interiorizadas, al menos quienes vivimos en Pamplona.
Para empezar vamos a suponer que el tamaño del Sol fuera como el quiosco de la Plaza del Castillo, que tiene alrededor de 8 metros de diámetro. A partir de ahí podemos adecuar la escala del resto del sistema solar a través de sencillas operaciones matemáticas de regla de tres. Pero para que te sea más fácil, aquí te dejo una calculadora web que he creado especialmente para este ejercicio.
Si el Sol fuera el quiosco, mercurio estaría situado a 333 metros, en el cruce de Carlos III con Emilio Arrieta, un poco más allá del Monumento al Encierro y su tamaño sería el de una canica gorda de las que en mi tiempo se llamaba “vaca”. Aquí comienza el ejercicio de situación, imagínate con una canica grande a 333 metros de distancia pensando que aquel quiosco tiene efectos gravitatorios sobre esta canica.
El siguiente planeta, venus estaría situado a 622 m de distancia, en el cruce con la calle San Fermín, junto al “Panadero de Eugui” y su tamaño sería el de una pelota de tenis.
La Tierra estaría a 860 m, en el cruce con la Calle Castillo de Maya, una manzana antes de llegar a la Plaza de la Libertad, y su tamaño sería el de una pelota de Béisbol.
Para encontrar a Marte nos tendríamos que ir hasta las cercanías del Club de Tenis, a 1,3 Km y su tamaño sería el de una pelota de ping pong, perdón, de tenis de mesa. Este puede ser un buen momento para volver a pararnos e intentar comprender lo que tenemos hasta ahora. Una canica, una pelota de tenis, otra de béisbol y una de tenis de mesa girando a esas distancias alrededor del quiosco de la Plaza del Castillo.
Para encontrar el siguiente planeta, Júpiter, ya nos tenemos que salir de Pamplona. Lo encontramos a 4,5 Km de distancia de nuestro quiosco-sol, en la entrada del polígono industrial de Noain, junto al Back Flip, para quienes les guste hacer piruetas con el patinete. Es el planeta más grande del Sistema Solar, por lo que su tamaño comparado sería el de una pelota de pilates grande, de unos 85 cm de diámetro.
La siguiente parada ya será en Saturno que lo encontraríamos a 8,2 Km, en la frontera entre Noain y Beriain, junto al acueducto de Noain. Su tamaño sería la de una pelota de pilates mediana, de unos 65 cm de diámetro.
Urano lo tendríamos a 16,5 Km junto a la entrada de las canteras de Alaiz, al poco de pasar Campanas. Y su tamaño sería algo mayor que el de una pelota de fútbol.
Y por último, Neptuno lo encontraríamos casi a 26 Km, en la carretera de Madrid, a medio camino entre Barasoain y Pueyo, con un tamaño similar al de Urano, algo mayor al de una pelota de fútbol.
Con esto ya tenemos montado el Sistema Solar con los principales astros que lo componen. Ahora tocaría volver a revisar estos tamaños y distancias con la imaginación para intentar visualizarlos. Esto nos puede dar una idea del espacio que hay entre los planetas y la fuerza del efecto grabitatorio. Os invito a visitarlos en la realidad con sus correspondientes pelotas a mano para facilitar la visualización.
Mientras tanto, aquí os dejo el mapa de viaje para que todo quede más claro. ¡¡Féliz viaje!
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